- Punto de partida y llegada: Valmojado (Toledo)
- Pueblos de paso: Aldea del Fresno, Pelayos de la Presa y San Martín de Valdeiglesias
- kms de la ruta: 89 kms
- kms de la ruta: 89 kms
- Tiempo de la ruta pedaleando: 4:32:05 h
- Media del recorrido: 19,60 km p/h
- Velocidad Máxima: 48,5 km p/h
- Bikers: Gerardo. Pablo, Javi, Oscar (Pocholo), Samuel y Ángel (elchatanga)
- Fecha: 3 de Mayo del 2015
Para ver el track de la ruta PINCHA AQUÍ
Para la ruta de hoy he elegido acercarme hasta un sitio donde el año pasado me quedé a escasos 4 kms por llevar unos cuantos a la espalda y tener que volver con hora. Tampoco toca madrugar mucho pero si que me cuesta algo mas de lo habitual levantarme debido al cambio de turno del trabajo. Son las 7 y se puede apreciar por la ventana que el dia comienza a abrir cuando me levanto. Me atavío, bla, bla, bla, bla y en un rato me dirijo a coger la bici que previamente dejé preparada en el día de ayer. Llego el primero al punto de encuentro y en breve aparecen Javi, Samuel, Pablo, Gerardo y Oscar. Han pasado 5 minutos de la hora prevista y comenzamos a pedalear con el aviso de Oscar que aguantaria hasta donde pudiese debido a la inactividad que lleva. En los 2 primeros kms tengo que intentar calentar la pierna derecha porque hoy no va fina debido a la caída. Camino típico hacia la Aldea que nos lleva a llegar a este en unos 50 minutos. Para evitar la carretera en lo posible, tomamos camino por el paseo junto al río Alberche para subir hasta el puente de los 12 ojos y pasar el cauce. Aquí el tramo por la M-507, como muchas veces he contado, es de 2 kms hasta girar hacia la urbanización de Picadas. En esta zona me quedo en la parte de atrás del grupo acompañando a Pablo y compartiendo chascarrillos. También aprovecho para ir indicándole el tramo siguiente a tomar. Empieza a inclinarse hacia arriba la carretera y serpenteando por sus curvas llegamos a la parte alta de la montaña. Aquí parada técnica de los de cabeza donde los de atrás no tenemos tiempo ni de parar y nos dejamos caer. Disfrutamos de la bajada de apenas 1 km que nos lleva a cruzar la Presa del Embalse de Picadas que tantas veces he pasado pero que no me cansare de pasar.
El tramo siguiente por el borde del embalse nos lleva a pedalear por una zona tranquila y con un desnivel que nos deja contemplar el bonito paraje pero sin descuidarnos de dar pedales. Ligerisimo ascenso donde nos cruzamos con bikers y donde puedo ver a gente pescando en barca. El día sin nada de calor ni sol acompaña con buena temperatura nuestro paso por esta bien transitada Vía Verde de San Martín o Picadas.
A la altura del km 32,5 nos encontramos con el único túnel de esta Vía, donde Pablo no duda en adentrarse junto a Javi y Ángel. Los
otros tres, siguen el paso por el
camino. No tardando mucho llegamos a la altura del Club de Piragüismo, que tras subir el sendero de la drcha para pasar la barrera, emprendemos bajada por el parque de los pinos para llegar a la entrada del paso del desfiladero, donde Oscar y Samuel nos comunican que se dan la vuelta para volver a tiempo. Nos hacemos la foto de grupo, alguno pica algo y enseguida proseguimos pedaleando. La salida a la M-501 hay que hacerla seguro y rápido a la vez por la cantidad de coches que pasan por ella. Un par de minutos tardamos en ello, llegando a la gasolinera de Pelayos de la Presa, que bordeamos por la derecha. El camino, el de siempre, subida por asfalto en dirección al Pantano de San Juan pero unos metros antes de llegar, salida por la izquierda a la Vía Pecuaria del camino del Ferrocarril, que bordeando el pueblo de Pelayos por las urbanizaciones colindantes, nos hace pedalear durante 9 kms hasta adentrarnos en el pueblo de San Martín de Valdeiglesias, para parar junto al Castillo a repostar y descansar un ratillo.
Tenemos suerte de llegar justo cuando la mujer encargada de abrir el recinto de alrededor del Castillo, (que no del interior, que venia a las 11 h), y nos deja pasar para hacer alguna instantánea. No dura mas el parón mas de 5 minutos y Javi se pone nervioso ante la vuelta, a lo cual tenemos que hacer caso y cabalgar de retorno a casa.
El perfil del retorno, ahora es favorable y durante los primeros 16 kms hemos "metido mucha caña" a las piernas para subir la media de pedaleo. amos muy por delante del tiempo pensado por mí en un principio. Hasta nos hemos permitido hacer lo que siempre hacemos cuando "avistamos" algún biker por delante, que no es otra cosa que "alegrar el pedaleo", jejeje. Pelayos lo pasamos muy ligeros y hasta llegar a la gasolinera me permito ir tomando todo sendero a la izquierda para divertirme un rato. El paso del desfiladero lo hacemos en caravana con los coches, lo cual nos hace ir mas pendiente de los de al lado que de ti mismo (sabéis de lo que hablo). El aumento en la zona de Picadas de gente, se va notando. La afluencia de senderistas es bastante elevada. Pese a ser en ligera bajada, los kms se van acumulando y me da tiempo a intercambiar opiniones con Pablo, que a eso del km 60, ya ha pasado su barrera de la distancia.
Se decide hacer una parada después de la subida de la Presa de Picadas cuya inclinación según una señal de bastantes años atrás, es de un 11%. Se pensó en hacerla antes, pero mejor subir calentitos como íbamos que tener que calentar subiendo después. Cada uno a su ritmo, bueno eso he dicho los primeros 10 metros de subida, pero Gerardo se ha "lanzado" y no he tenido por mas que salir a su rueda. Las fuerzas no las llevaba mal y no me ha costado mucho coronar, no sin antes bajar a la parte trasera para apoyar a Pablo en la parte final de la subida. Parón técnico en el punto alto y bajada serpenteante rápida hasta Aldea.
Callejeamos por el pueblo para salir a Frigo y me encuentro con Vazquez al que saludo y subiendo por el tramo nuevo hacia el depósito del agua nos encontramos con Félix. Paramos Gerardo y yo, puesto que eramos los únicos que le conocíamos. Javi y Pablo se alejan por momentos pero antes de llegar al depósito nos reagrupamos de nuevo todos. Al llegar a las Bodegas, Javi tiene que parar para dar aire a la rueda delantera que tiene que haber cogido algún abrojo para llegar al pueblo sin cambiarla. Lo consigue por momentos pero hay que darla otra vez aire. Y en los últimos kms, Pablo nos ha demostrado que no sólo estaba entero sino que se ha permitido adelantarnos a buen ritmo.
Y con esto llegamos a casa tras 90 kms con el objetivo cumplido y ya pensando en la siguiente.
Reconocimiento especial para Pablo, por que no sólo se ha atrevido a pasar su barrera de los 60 sino que ha añadido 30 mas. EL LÍMITE ESTÁ EN LA MENTE Y EL TRABAJO EN LA CONSTANCIA "Elchatanga". Nos vemos en ruta.
- Fecha: 3 de Mayo del 2015
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Para la ruta de hoy he elegido acercarme hasta un sitio donde el año pasado me quedé a escasos 4 kms por llevar unos cuantos a la espalda y tener que volver con hora. Tampoco toca madrugar mucho pero si que me cuesta algo mas de lo habitual levantarme debido al cambio de turno del trabajo. Son las 7 y se puede apreciar por la ventana que el dia comienza a abrir cuando me levanto. Me atavío, bla, bla, bla, bla y en un rato me dirijo a coger la bici que previamente dejé preparada en el día de ayer. Llego el primero al punto de encuentro y en breve aparecen Javi, Samuel, Pablo, Gerardo y Oscar. Han pasado 5 minutos de la hora prevista y comenzamos a pedalear con el aviso de Oscar que aguantaria hasta donde pudiese debido a la inactividad que lleva. En los 2 primeros kms tengo que intentar calentar la pierna derecha porque hoy no va fina debido a la caída. Camino típico hacia la Aldea que nos lleva a llegar a este en unos 50 minutos. Para evitar la carretera en lo posible, tomamos camino por el paseo junto al río Alberche para subir hasta el puente de los 12 ojos y pasar el cauce. Aquí el tramo por la M-507, como muchas veces he contado, es de 2 kms hasta girar hacia la urbanización de Picadas. En esta zona me quedo en la parte de atrás del grupo acompañando a Pablo y compartiendo chascarrillos. También aprovecho para ir indicándole el tramo siguiente a tomar. Empieza a inclinarse hacia arriba la carretera y serpenteando por sus curvas llegamos a la parte alta de la montaña. Aquí parada técnica de los de cabeza donde los de atrás no tenemos tiempo ni de parar y nos dejamos caer. Disfrutamos de la bajada de apenas 1 km que nos lleva a cruzar la Presa del Embalse de Picadas que tantas veces he pasado pero que no me cansare de pasar.
A la altura del km 32,5 nos encontramos con el único túnel de esta Vía, donde Pablo no duda en adentrarse junto a Javi y Ángel. Los
otros tres, siguen el paso por el
El perfil del retorno, ahora es favorable y durante los primeros 16 kms hemos "metido mucha caña" a las piernas para subir la media de pedaleo. amos muy por delante del tiempo pensado por mí en un principio. Hasta nos hemos permitido hacer lo que siempre hacemos cuando "avistamos" algún biker por delante, que no es otra cosa que "alegrar el pedaleo", jejeje. Pelayos lo pasamos muy ligeros y hasta llegar a la gasolinera me permito ir tomando todo sendero a la izquierda para divertirme un rato. El paso del desfiladero lo hacemos en caravana con los coches, lo cual nos hace ir mas pendiente de los de al lado que de ti mismo (sabéis de lo que hablo). El aumento en la zona de Picadas de gente, se va notando. La afluencia de senderistas es bastante elevada. Pese a ser en ligera bajada, los kms se van acumulando y me da tiempo a intercambiar opiniones con Pablo, que a eso del km 60, ya ha pasado su barrera de la distancia.
Se decide hacer una parada después de la subida de la Presa de Picadas cuya inclinación según una señal de bastantes años atrás, es de un 11%. Se pensó en hacerla antes, pero mejor subir calentitos como íbamos que tener que calentar subiendo después. Cada uno a su ritmo, bueno eso he dicho los primeros 10 metros de subida, pero Gerardo se ha "lanzado" y no he tenido por mas que salir a su rueda. Las fuerzas no las llevaba mal y no me ha costado mucho coronar, no sin antes bajar a la parte trasera para apoyar a Pablo en la parte final de la subida. Parón técnico en el punto alto y bajada serpenteante rápida hasta Aldea.
Callejeamos por el pueblo para salir a Frigo y me encuentro con Vazquez al que saludo y subiendo por el tramo nuevo hacia el depósito del agua nos encontramos con Félix. Paramos Gerardo y yo, puesto que eramos los únicos que le conocíamos. Javi y Pablo se alejan por momentos pero antes de llegar al depósito nos reagrupamos de nuevo todos. Al llegar a las Bodegas, Javi tiene que parar para dar aire a la rueda delantera que tiene que haber cogido algún abrojo para llegar al pueblo sin cambiarla. Lo consigue por momentos pero hay que darla otra vez aire. Y en los últimos kms, Pablo nos ha demostrado que no sólo estaba entero sino que se ha permitido adelantarnos a buen ritmo.
Y con esto llegamos a casa tras 90 kms con el objetivo cumplido y ya pensando en la siguiente.
Reconocimiento especial para Pablo, por que no sólo se ha atrevido a pasar su barrera de los 60 sino que ha añadido 30 mas. EL LÍMITE ESTÁ EN LA MENTE Y EL TRABAJO EN LA CONSTANCIA "Elchatanga". Nos vemos en ruta.
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